viernes, 26 de septiembre de 2008

LOS CIBERNAUTAS PERDIDOS


ALBA LUCIA CASTRO.
Orientadora familiar

Las tecnologías de información y comunicación, TICs, son una maravilla porque ha hecho del mundo una gran aldea global, estableciendo tres sistemas: de transmisión información, comunicación y un sistema que permite el acceso al conocimiento.

Las TICs, tienen su base en la cibern-ética, que es el estudio del control y comunicación en los sistemas complejos: organismos vivos, máquinas y organizaciones, ciencia constituida en 1942.

Al unirse estos tres sistemas, se busca que las máquinas sean similares en inteligencia al ser humano, -pero con control fundamentado en la ética- máquinas que sirvan para mejorar la calidad de vida de la especie humana, tanto individual como para las organizaciones científicas, políticas, económicas y sociales.

Es así como la unión de diferentes ciencias como la mecánica, electrónica, medicina, física, química y computación, han dado el surgimiento de una nueva doctrina llamada Biónica, La cual busca imitar y curar enfermedades y deficiencias físicas.

Dentro de la cibernética tenemos la internet que es una red que enlaza centenares de computadores que se afilian a de miles de redes locales. Así, las personas se comunican de manera ágil, en tiempo real (chateando) o diferido (correo electrónico) y se envían cualquier información de último minuto, fotos, videos, programas etc..

Además, permite localizar información ofrecida por empresas, científicos, organizaciones de cualquier tipo y otros usuarios sobre los temas más dispares, también facilita la realización de negocios, diligencias bancarias y el control remoto de máquinas y lugares.

Todo suena bien, pero también trae amenazas contra la integridad de las personas. La información que circula es de cualquier tipo y sin control de veracidad ni rectitud. Los grupos de gente que se comunican lo pueden hacer con cualquier propósito, bueno o malo.

Se corre el riesgo de que las personas se vuelvan adictas a la internet, entonces pueden desplazar las actividades y la comunicación real con su familia, aislarse socialmente y, en cambio, contactarse con personas malvadas o psicóticas (satánicos, delincuenciales, EMOs) y meterse en problemas.

Sabe Usted, ¿Con quien se conecta su hijo? ¿Sabe si las fuentes de consulta que utiliza son confiables? Asegúrese de que los juegos que el practica no le estén enseñando como matar o pelear. Los invito a ingresar a la cibercultura, con el fin de que puedan orientar a sus hijos en el uso adecuado de las TICs para que no lleguen a ser cibernautas perdidos entre la "basura" que corre por internet.